El grupo también ha hecho un detallado relevamiento por las escuelas de la ciudad de Castillos, y el resultado es preocupante: unos ciento veinte niños no cuentan con la vestimenta adecuada para esta época del año.
Yo no sé ustedes, pero a mí me dan ganas de aprender a tejer, pero creo que dada mi antidestreza en el tema me voy a limitar a lo que humildemente puedo hacer desde aquí: donar alguna prenda que pueda servir de materia prima, y sobre todo exhortar a los lectores del Herald a hacer lo mismo.
Para quien quiera saber más, nuestro colega Daniel Fernández, columnista de Castillos on Line, ha creado un blog con profusa información sobre el proyecto, cuya dirección es www.manossolidariascastillenses.blogspot.com. Y por mayor info, el propio Daniel, a quien pueden ubicar en Centro de Compras, ahí en la calle Lavalleja, en pleno centro de Castillos, los asesorará con mucho gusto.
Y para las tejedoras, o tejedores si es el caso: el Aguas Dulces Herald se saca el sombrero ante esta idea, y ante esta gente que quiere lo mejor para la gente. ¿Quién dijo que todo está perdido?
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