¡feliz año, amigos!

¿Por qué vas a levantar la copa esta noche? Seguramente para que el año que empieza en unas horas nomás sea mejor que el que se va. O porque éste que se termina fue muy bueno. Seguramente porque querés lo mejor para los que vos querés. Muy probablemente, como muchos, porque querés que de alguna manera este mundo funcione de una vez por todas como la habitación de los humanos, y no como su mero soporte. Como muchos, levantarás tu copa porque querés que todos vivan mejor.
En lo personal al Herald le gustaría brindar con los que se nos fueron este año. Con los que lamentablemente les tocó irse más temprano de lo que hubiéramos esperado, como Gustavo, o Silva. Con Don San Martín. Con el Indio, que como no podía ser de otra manera, se fue bailando en un eclipse de luna.
Y queremos brindar con ustedes, con los que se quedan. Porque nos quedamos. Con los que día a día nos toca mirarnos, nos toca sabernos allí como compañeros de este viaje tan extraño y maravilloso. Con todos ustedes, a las doce levantaremos la copa y diremos bajito, íntimamente y con los mejores deseos: ¡Feliz año, amigos!